¡Cambios Radicales en el Sistema de Salud!
El Gobierno Nacional ha anunciado la creación de la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES), un organismo que centralizará la gestión de cinco hospitales nacionales clave. Pero la noticia que realmente está generando controversia es la absorción del Instituto Nacional del Cáncer (INC) y la eliminación del Instituto Nacional de Enfermedades Cardiovasculares (INEC).
Según el decreto que se publicará en el Boletín Oficial, la ANES supervisará los hospitales Baldomero Sommer, Alejandro Posadas, Ramón Carrillo, Laura Bonaparte y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica del Sur. Esto significa que la gestión administrativa, financiera y jurídica de estos centros de salud estará unificada bajo un mismo paraguas.
¿Qué Sucederá con el Instituto Nacional del Cáncer?
El Instituto Nacional del Cáncer (INC) será absorbido por el Ministerio de Salud, integrándose como una unidad organizativa interna. Fuentes oficiales aseguran que esta medida no afectará la continuidad de los programas ni del equipo profesional, sino que simplificará su estructura para mejorar la gestión. Sin embargo, la medida genera incertidumbre entre pacientes y profesionales de la salud.
¿Por qué estos Cambios?
El Gobierno justifica estas medidas como parte de un reordenamiento institucional profundo del sistema de salud, buscando reducir la burocracia y mejorar la eficiencia. Se han detectado, según fuentes oficiales, “graves irregularidades en los procesos de licitación, servicios tercerizados y compra de insumos” en los hospitales nacionales.
El objetivo principal es garantizar una administración pública más transparente, ágil y de alta calidad, concentrando los procesos de compras y licitaciones en la ANES. Se espera que estos cambios permitan reducir la planta administrativa de cada hospital y optimizar el uso de los recursos.
A pesar de las promesas de mejora, la absorción del INC y la eliminación del INEC generan preocupación sobre el futuro de la investigación y el tratamiento de enfermedades tan importantes como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Habrá que esperar para ver cómo se implementan estos cambios y cuál será su impacto real en la atención de la salud en Argentina.