Gabriel Boric, el actual presidente de Chile, se ha enfrentado a numerosos desafíos durante su mandato, abarcando desde la seguridad interna hasta la política exterior. En Argentina, sus decisiones y políticas son seguidas de cerca, especialmente en temas de interés regional.
Seguridad: Una Prioridad Constante
Desde su primera cuenta pública, Boric ha destacado la seguridad como una de sus principales prioridades. Inicialmente, enfocándose en reducir la delincuencia común, ha implementado medidas como el aumento de dotaciones policiales y la construcción de nuevos cuarteles. Sin embargo, la evolución de la criminalidad organizada ha requerido un enfoque más integral.
Planes como el Plan Contra el Crimen Organizado (PNCO) y Calles Sin Violencia han recibido inversiones millonarias, destinadas a fortalecer instituciones clave como Carabineros, la Policía de Investigaciones y el Ministerio Público. A pesar de estos esfuerzos, la percepción de inseguridad persiste, generando debates sobre la efectividad de las estrategias implementadas.
Política Exterior: El Conflicto en Medio Oriente
Recientemente, la decisión de Boric de retirar a los agregados militares de la embajada de Chile en Israel generó controversia. Esta medida, tomada en respuesta a la ofensiva en Gaza, fue criticada por sectores de la oposición y la Comunidad Judía, quienes la consideraron una acción ideologizada que podría debilitar las relaciones bilaterales y poner en riesgo la seguridad de los chilenos residentes en Israel.
La postura de Boric refleja una preocupación por la situación humanitaria en Gaza, pero también plantea interrogantes sobre el impacto en la cooperación internacional y la capacidad de Chile para influir en la resolución del conflicto. La comparación con otros países árabes que buscan construir puentes para la paz subraya la complejidad de la situación.
De Cara al Futuro: Desafíos y Expectativas
A medida que se acerca el final de su mandato, Boric se enfrenta al desafío de consolidar los logros en materia de seguridad y política exterior. La cuenta pública final será crucial para evaluar el impacto de sus políticas y sentar las bases para el futuro. En Argentina, se espera que las decisiones de Boric sigan influyendo en el debate regional y las relaciones bilaterales.