La disputa legal entre la influencer Cami Mayan y el futbolista Alexis Mac Allister ha dado un giro inesperado. Un reciente fallo judicial determinó que la demanda de Mayan por una compensación económica, tras su relación de cinco años con el jugador, deberá resolverse en Inglaterra, donde no existe la figura legal de compensación económica por convivencia.
¿Qué pasó?
Cami Mayan, quien argumenta haber pausado sus aspiraciones profesionales para apoyar la carrera de Mac Allister, reclama una compensación económica de 6 millones de dólares. La pareja convivió en Inglaterra mientras él jugaba para el Brighton. Tras la ruptura en 2022, Mayan recurrió a la justicia argentina, pero el equipo legal de Mac Allister logró que la causa se traslade a territorio inglés.
Reacción de la Familia Mac Allister
Silvina Riela, madre de Alexis Mac Allister, expresó su opinión sobre el caso, señalando que la familia considera lógica la decisión judicial y que no celebran el fallo. Según Riela, la demanda ha afectado la imagen de su hijo y cuestionó la validez del reclamo económico tras una convivencia de poco más de dos años sin matrimonio.
El Futuro Legal del Caso
Cami Mayan y sus representantes legales están evaluando los próximos pasos a seguir. Una opción es apelar la resolución ante la Corte Suprema Argentina, lo que implicaría costos adicionales. También existe la posibilidad de llevar la causa directamente a Inglaterra, aunque esto implicaría litigar bajo un marco legal menos favorable para Mayan.
La Palabra de Cami Mayan
Consultada sobre el fallo, Cami Mayan declaró que está analizando las opciones legales disponibles y que no descarta otras instancias antes de recurrir a la justicia inglesa. La influencer, actualmente trabajando en LUZU TV, mantiene la incertidumbre sobre el futuro de su reclamo económico.
Implicaciones y Perspectivas
Este caso pone de manifiesto las complejidades legales y emocionales que pueden surgir tras una ruptura sentimental, especialmente cuando involucra figuras públicas y relaciones internacionales. La decisión de la justicia argentina de declararse incompetente abre un nuevo capítulo en esta controversia, dejando en manos de la justicia inglesa la resolución final.