Un insólito suceso sacudió la tranquilidad de Villa Carmela, Tucumán. Un joven de 22 años, dado por muerto tras un confuso incidente vial, irrumpió en su propio velorio al grito de "¡Estoy vivo!". La escena, digna de una comedia, dejó a los presentes entre el asombro y el alivio.
Confusión y Reencuentro
La historia comenzó cuando la madre del joven, preocupada por su desaparición, identificó erróneamente el cuerpo de un motociclista fallecido en un accidente cerca del puente Ingeniero Barros. La policía, actuando de buena fe, entregó el cadáver a la familia para su sepultura.
Sin embargo, la sorpresa fue mayúscula cuando, en pleno velorio, el supuesto difunto apareció, sano y salvo. Según testigos, la reacción fue de desconcierto y alegría. "Muchos se espantaron, otros gritaron y lloraron, estábamos helados", relató una vecina.
¿Qué Sucedió Realmente?
Tras el revuelo, el joven explicó a las autoridades que había estado consumiendo drogas en otra zona de Alderetes y desconocía el error de identificación. El fiscal Carlos Sale, a cargo del caso, tomó su declaración para esclarecer los hechos.
El subjefe regional Carlos Ramírez lamentó el incidente, pero defendió el accionar policial, señalando que la familia reconoció el cuerpo y se siguió el protocolo correspondiente. Ahora, las autoridades investigan cómo se produjo la confusión y se aseguran de identificar correctamente al verdadero fallecido.
Un Final Feliz (Con Respaldo Legal)
Más allá del susto y la confusión, la historia tuvo un final feliz para la familia del joven, que pudo celebrar su regreso a la vida. Este peculiar incidente sirve como recordatorio de la importancia de la correcta identificación de personas fallecidas y de la necesidad de extremar las precauciones en situaciones tan delicadas.
- La familia identificó erróneamente un cuerpo.
- El joven reapareció en su propio velorio.
- Las autoridades investigan la confusión.