Fuerte tensión en el mercado cambiario argentino. El Banco Central de la República Argentina (BCRA) se vio obligado a realizar una intervención masiva para contener la presión alcista sobre el dólar, en un contexto de creciente incertidumbre económica.
BCRA Vende Millones para Frenar al Dólar
En una jornada marcada por la volatilidad, el BCRA desembolsó la considerable suma de USD 379 millones en el mercado de cambios. Esta cifra, que se suma a los USD 53 millones vendidos el día anterior, representa la mayor intervención en los últimos cinco meses. El objetivo principal: frenar el aluvión de compradores y evitar una escalada aún mayor del tipo de cambio.
La fuerte demanda de dólares se reflejó en un volumen de operaciones que alcanzó los USD 590 millones, lo que implica que el BCRA proveyó casi dos tercios de la oferta total del día. La presión sobre el tipo de cambio mayorista lo llevó a operar en el límite superior de la banda cambiaria, cotizando entre $1.465,50 y $1.474,50. En el mercado paralelo, el dólar blue experimentó un salto de $20, ubicándose en $1.510.
¿Plan Caputo-Milei en Jaque?
La situación actual plantea interrogantes sobre la efectividad del plan económico implementado por el gobierno de Javier Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo. Las intervenciones del BCRA contrastan con las declaraciones previas de Caputo, quien había afirmado que el tipo de cambio se acercaría a los $1000 y hasta ironizaba sobre la compra de dólares. Ahora, la realidad muestra un escenario diferente, con el BCRA defendiendo el techo de la banda cambiaria mediante la venta de reservas.
Impacto en la Economía Real
La tensión cambiaria y la incertidumbre económica tienen un impacto directo en la economía real. La inflación mayorista ha experimentado un salto, encendiendo alarmas sobre el costo de vida y el poder adquisitivo de los ciudadanos. Además, los bonos soberanos han vuelto a desplomarse, las acciones siguen en caída libre y el riesgo país se mantiene elevado, superando los 1200 puntos básicos.
El futuro inmediato presenta desafíos importantes para el gobierno y el BCRA. Será crucial monitorear de cerca la evolución del mercado cambiario, las expectativas inflacionarias y la respuesta de los agentes económicos. La sostenibilidad del techo de la banda cambiaria dependerá de la capacidad del gobierno para generar confianza y estabilizar la economía.